Hotel
Pey
Una rehabilitación integral de las zonas nobles de un hotel de montaña cargado de tradición. Los múltiples espacios de planta baja, en su mayoría infrautilizados, se funden en uno solo para crear zonas de bienvenida y relax. En la misma operación surge un nuevo negocio dentro del hotel, el delicatesen Rebost Gourmet, comercio especializado en vinos y delicias del terreno. La antigua entrada de mercancías pasa a ser la entrada noble del hotel gracias a la pérgola que la protege de las inclemencias y a una escultura de hierro que actúa como un arco de bienvenida. Para destacar la entrada se rodea la puerta con cientos de maderas apiladas meticulosamente, con una vocación claramente artística. En el interior, lámparas hechas con la paja de los establos, maderas recuperadas y colores tierra bañados por la luz cálida de los leds ocultos.